viernes, 15 de febrero de 2008

Siempre estarás conmigo

Yo soy yo
Tu eres tú
tú, tu vida
yo la mia
y ambas compartidas.

En esas pocas palabras se resumía la mejor relación de amistad que he tenido nunca y que jamás tendré. Era nuestra frase, y digo era porque ella ya no está. Y la sigo echando mucho de menos y recordandola cada día que pasa. Nos conocimos cuando empezábamos a saber un poco lo que es la vida, y entre las dos creamos un vínculo muy especial. No teníamos mucho en común, o tal vez sí.... la energía positiva, las ganas de reir por todo, de seguir adelante pese a todas las dificultades, de conocer gente, bailar, nuestros vinitos... Pero en el fondo, ambas teníamos formas distintas de enfrentarnos al mundo, y eso, a lo largo de los años nos separó, aunque sabíamos que para lo que fuese la otra seguiría ahí, a una llamada de teléfono...
Puede que ella tuviera más corazón y lo diese más, por eso se le rompió antes.. y tal vez fuera eso, no lo sé, lo que hizo que nuestros objetivos fuesen más diferentes, y la distancia hizo el resto. En los últimos años de su vida solo hubo unas cuantas llamadas para contarnos lo que realmente nos dolía (ella perdió a su padre, yo a mi madre) y lo que nos hacía felices.. La última llamada fúe para contarle que había tenido a mi hijo... y aún recuerdo sus palabras, "Pequeña, serás una gran madre", y colgamos con la promesa de vernos pronto y poder conocer a mi hijo. No pudo ser, después de mes y medio ella se fué para siempre, de repente, sin avisar a nadie... Y nos dejó con un vacio que nadie llenará. Ella era especial.

Y pasa el tiempo, la herida no se cura, y la sigo recordando en multitud de pequeños momentos y la veo sonreir... Alla donde estés cuida de nosotros, todos los que te queriamos... Descansa

2 comentarios:

Natacha dijo...

Hola vengo a darte una sorpresa. Tengo un regalo para tí en mi blog. Cuando puedas pasa a buscarlo. Espero que te guste y te anime a seguir por aquí.
Un beso grande.
Natacha.

Estrella Solitaria dijo...

Mil gracias Natacha, seguiré por aquí, me das un nuevo motivo para no perderme.